Propaem realiza inspecciones en los rellenos de la entidad.
La Propaem clausuró un segundo relleno sanitario en el municipio de Atizapán de Zaragoza.
La Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (Propaem) clausuró un relleno sanitario ubicado en el municipio de Atizapán de Zaragoza, debido a que no cuenta con un estudio de impacto ambiental, así como por ser un foco de infección.
El organismo mexiquense detalló que en el relleno clausurado de reciben alrededor de 90 toneladas de desechos sólidos al día, por lo que las 39 hectáreas que comprenden el predio denominado «Puerto de Chivos» ubicado en las inmediaciones de la Universidad Autónoma del Estado de México.
En el procedimiento administrativo identificado como PROPAEM/0187/2018 detalla que debido a que no se exhiben las autorizaciones para manejar los residuos sólidos y no cumplió con los requisitos ambientales, por lo que se realizó el cierre del tiradero mediante sellos de clausura.
Durante la colocación de los sellos, vecinos del fraccionamiento Paseo de San Carlos indicaron que durante años han denunciado el inmueble por los olores que emanan de los residuos, así como la proliferación de ratas, cucarachas, moscas, entre otras plagas que podrían generar focos infecciosos.
Cabe señalar que el inmueble es administrado por comuneros de Atizapán de Zaragoza desde hace varios meses atrás, por lo que el gobierno municipal decidió llevar alrededor de 500 toneladas de los desechos que se manejan en la demarcación, hacia otro tiradero ubicado en Cuautitlán Izcalli.
Al respecto, el procurador de Protección al Ambiente del Estado de México, Luis Eduardo Gómez, detalló que como parte del organismo se debe garantizar el derecho de que la ciudadanía viva en ambientes adecuados para su desarrollo, así como su salud y bienestar, por lo que se debe procurar, vigilar y difundir los estatutos de normatividad que el estado implementa.
La Propaem mantiene una revisión constante de los rellenos sanitarios del Estado de México, con el fin de que se verifique que cuente con las autorizaciones necesarias en regla y afecte de la menor manera posible al medio ambiente, ,y así disminuyan los riesgos de salud en los habitantes de la entidad, indicó el procurador.
Asimismo, señaló que el personal que realiza las inspecciones cuentan con la instrucción de que se inicien acciones para que se proceda ante las autoridades competentes en cuanto se observen actos que se consideren como un riesgo ambiental y causen algún desequilibrio ecológico, así como en caso de que se lleguen a violar los aspectos jurídicos en materia ambiental.
Como antecedente, en el municipio de Tlalnepantla el pasado 13 de febrero se clausuró un relleno sanitario ubicado en San Pedro Barrientos.
HOY NOVEDADES/EDOMEX
