En 2022, un total de 31 estados en México gastaron más del 10% de su presupuesto original
Las cuentas públicas estatales representan una tercera parte de la cuenta pública federal, de ahí la relevancia de que las autoridades se apeguen a sus presupuestos.
A nivel estatal, la planeación y ejercicio del presupuesto es uno de los retos más relevantes. Dado que las decisiones presupuestales sobre asuntos públicos pueden representar la solución, estancamiento o profundización de algún problema. Sin embargo, en México existe una tendencia de las autoridades de modificar los presupuestos al alza. De acuerdo con un análisis de Contra la Corrupción, en 2022, 31 estados gastaron casi 10% más de lo presupuestado originalmente.
La legislación en materia de finanzas, define que la planeación presupuestaria de Gobiernos y entidades federativas en México debe responder a los objetivos y metas de los planes de desarrollo y sus programas derivados. Sin embargo, esto es un supuesto, pues cada entidad se enfrenta a retos y circunstancias diversas que obligan a las autoridades a reajustar sus egresos.
Así, en los avances trimestrales, puede visualizarse cuál fue el presupuesto inicial, así como cuánto y en qué se terminó gastando. El estudio de Contra la Corrupción, demuestra que diversos Gobiernos no tienen una idea clara sobre cuánto invertirán en diversos insumos al conformar sus presupuestos. A su vez, se observa una tendencia en el gasto de ciertos insumos a nivel nacional. Con lo cual puede deducirse cuáles son los intereses y preocupaciones en donde el Gobierno pone mayor atención.
Como ejemplo de ello, se hace mención del gasto de los estados en servicios de comunicación y publicidad oficial durante 2022. Diversas entidades aumentaron su presupuesto en este rubro, sin embargo, lo que llama la atención son las cantidades invertidas. Por ejemplo, Tamaulipas había presupuestado 14.8 millones de pesos para este servicio y su gasto final fue por más de 490 millones de pesos. Por otra parte, estados como Puebla, Yucatán y Guanajuato, realizaron inversiones que por lo menos triplicaron el presupuesto original.
Siguiendo el estudio, más del 50% de los estados hicieron subejercicios presupuestales en programas sociales durante 2022. A su vez, 13 de los 17 estados que aumentaron su gasto en este rubro, ejercieron gastos superiores a los 100 millones de pesos. Siendo Veracruz, con mil 22 mdp, la Ciudad de México, con 787 mdp y el Estado de México, con 661 millones, las entidades que realizaron subejercicios por mayores montos en política social.
Esta clase de ampliaciones, donde se triplican las cantidades de los presupuestos planeados, evidencian la poca efectividad de reasignación de recursos por parte de las autoridades estatales. Además, esto plantea cuestionamientos sobre el cumplimiento de la normatividad, pues, Contra la Corrupción argumenta que los excedentes deben dirigirse a gasto social y deuda pública. Incluso, esto solo contempla casos excepcionales, en donde los gastos administrativos son estrictamente necesarios. Siendo que, como revela el estudio, los excedentes son invertidos en comunicación social y publicidad, vestuarios, blancos, prendas, artículos deportivos, vehículos y equipos de transporte.
Durante 2022, las cuentas estatales alcanzaron un total de 2.5 billones de pesos, correspondientes a una tercera parte de la cuenta pública federal, de 7.5 billones. Aunque, el estudio no remarca que porcentaje representan los excedentes, se menciona, los subejercicios de algunos estados pueden llegar a ser similares al presupuesto total de otras entidades. De este modo, Contra la Corrupción resalta la relevancia de hacer revisiones y análisis sobre el presupuesto federal. No solo por parte de autoridades públicas y entidades privadas, sino también desde la participación ciudadana.
Juan Manuel Flores (NotiPress)
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