En un barrio de Pekín se detectó un pequeño brote de la COVID-19, por lo que los dos millones de habitantes de la zona serán sometidos a test. Esto ocurre a menos de dos semanas del inicio de los Juegos Olímpicos de invierno, el 4 de febrero.
Las autoridades señalaron al distrito de Fengtai, en el sur de Pekín, como el epicentro del foco de seis contagios recientes, elevando a 40 el número de casos detectados en la capital en la última semana.
Sin embargo, el número de contagios que se dan en China son significativamente pequeños a comparación de otros países del mundo, donde la cuarta ola se intensifica debido a la variante ómicron.
A este momento, delegados internacionales, equipos de prensa y algunos atletas han comenzado a llegar a la ciudad para las competencias.
Para contener el virus, los participantes de los Juegos permanecerán en una burbuja cerrada de miles de personas sin contacto con el exterior.
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