La gubernatura de la CDMX quedará entre Sheinbaum o Barrales.
Para Barrales, los de Morena están nerviosos y se dice segura de ir arriba en las encuestas frente a su contrincante.
El PRI tiene frío, y mucho, pues por más encuestas que los posicionen arriba de los demás bien saben que la tienen dura para las siguientes elecciones, pero no sólo en la presidencia, pues es bien sabido que en ésta es «AMLO vs todos los demás», sino también en la CDMX, ya que en ella todo indica que la contienda es entre Morena y el Frente (PAN-PRD-MC); en ambos casos el tricolor sale sobrando, pues mientras la riña es entre dos partidos/coaliciones, tanto Meade como Arriola parecen estar haciendo únicamente acto de presencia.
En cuanto a la presidencia no hay lugar a dudas de que, ante Andrés Manuel (o el señor López, como lo han venido manejando con tal de separar al hombre del nombre) el PRI mandó a su mejor y más preparada carta como lo es José Antonio Meade, un político más que preparado académica y políticamente pero que de carisma e influencia en el público no tiene nada. En cuanto a Mikel Arriola, candidato del dinosaurio para gobernar la CDMX, sinceramente ¿quién se acuerda de él?
Y es que en este último caso las dos únicas contendientes para la gubernatura de la ciudad son Claudia Sheinbaum por parte de Morena, mientras que por la coalición PRD-PAN-Movimiento Ciudadano, va Alejandra Barrales. Ahora bien, estas dos políticas han y seguirán teniendo sus encontronazos, los cuales hacen mella –ahora sí-, tanto en medios de comunicación como en la gente. Para ejemplo de ello está la batalla campal que se dio entre simpatizantes de Morena y el Frente en Coyoacán, que si bien fue por demás comentada y en donde ambos partidos se echaron la bolita sobre quién inicio la bronca, nos dio el ejemplo más claro y literal de que los trancazos sólo son entre dos, mientras el PRI deberá observar la contienda desde el banquillo.
Asimismo, ya a mediados de Enero y al ver que no se le está tomando en cuenta, Mikel Arriola retó tanto a Sheinbaum como a Barrales a debatir, porque claro, si él mismo no se da a notar, entonces ¿quién?, pues las dos mujeres ni siquiera lo están tomando en cuenta como rival, porque seamos sinceros: no es rival para ninguna de ellas.
Sin embargo, parece que las candidatas se pasaron este reto por el arco del triunfo…o quizá ni siquiera se enteraron de éste.
Para recalcar, apenas en su actual mitin en Coyoacán, Alejandra Barrales comentó que ve «nerviosismo» en Morena (al PRI ni siquiera lo mencionó), pues asegura que Claudia Sheinbaum continúa con una estrategia de victimización al descalificar las encuestas que cierran la diferencia entre las dos contendientes, además de que la morenista canceló su mitin en Tláhuac, algo que para el Frente no se debe a la inseguridad, sino a la desconfianza en sí mismo y el miedo que le tiene a dicha trinidad.
Israel Yerena
HOY NOVEDADES/EN BOGA