En conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que el recientemente creado Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) dará un servicio mejor que el ya extinto seguro popular, abierto para toda la población y no será necesario estar inscrito para recibir consulta y tratamiento , de igual forma los medicamentos serán gratuitos y se buscará que la atención médica sea cada vez mejor porque: «no se puede resolver el problema del servicio médico en instituciones públicas solo con la ley» y es por eso que surge la pregunta obligada: ¿todo lo demás que está mal en el sistema de salud mexicano se puede arreglar con una sola ley?

El INSABI nace de una demanda ciudadana constante sobre los servicios de salud, sobre la necesidad del mejoramiento en la calidad de los servicios y sobre todo del incumplimiento de la deuda histórica del acceso a la salud de forma universal y gratuita, es por eso que la creación y puesta en marcha del INSABI es una acción gubernamental coherente con las necesidades del país, en donde millones de mexicanos carecen de acceso a la salud, por supuesto también que es una medida necesaria en un gobierno que se hizo llamar a sí mismo “La esperanza de México” en campaña y también es cierto que el acceso a la salud de forma universal y gratuita es un privilegio que solo los países más progresistas del orbe lo tienen, enhorabuena entonces por el gobierno del presidente Andrés Manuel por hacer lo necesario para garantizar la salud de las y los mexicanos. 

Sin embargo, ¿de dónde saldrán los recursos para semejante acción gubernamental? Judith Méndez quien es la coordinadora de Salud y Finanzas Públicas del Centro de Investigación Económica y presupuestaria (CIEP) enfatizó que el presupuesto para el INSABI es apenas una cuarta parte de lo que en realidad se necesita para una iniciativa de este nivel, aunada a la pretensión de dar una plaza permanente a los trabajadores de dicho instituto provocaría un gasto aún mayor. Actualmente le INSABI tiene un presupuesto asignado de 40 mmdp, sin embargo, el CIEP considera que necesita entre 162 mil y 900 mmdp para funcionar como está planeado ¿cómo se manejará eficaz y eficientemente una institución de este nivel con un presupuesto tan bajo? 

Discursivamente el INSABI es un instituto que acabará de tajo cientos de problemas del sistema de salud mexicano, de igual forma solucionará una deuda histórica con los millones de mexicanos que en pleno siglo XXI aún carecen de un sistema de salud digno, pero lo anterior no deja de lado que para lograrlo se necesita una planeación financiera exhaustiva; al parecer solo el tiempo podrá definir si el INSABI se queda en mera voluntad política o por fin dimos un paso a la construcción de una sociedad más justa.   

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