El IMCO ubicó que 157 contratos se adjudicaron de manera directa.
A pesar de los riesgos de corrupción, el IMCO aseguró que la obra del NAIM debe continuar para resolver la saturación del AICM.
Luego de concluir el análisis de 320 contratos para la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) determinó que sí existen puntos críticos y riesgos de corrupción en su desarrollo, que requieren eliminarse para poder continuar con la obra.
De acuerdo con Ana Tahís Martínez, investigadora de dicho instituto, en los contratos otorgados hasta abril pasado, se detectó potencial peligro de corrupción por obras adjudicadas directamente y procesos de licitación que se realizaron en muy poco tiempo.
En el análisis «Nuevo Aeropuerto Internacional de México, un proyecto indispensable: riesgos y oportunidades» el IMCO ubicó que 157 contratos se adjudicaron de manera directa y, aunque estos solo representan el 3 por ciento del monto total asignado mediante adjudicaciones directas o invitaciones restringidas, únicamente en 19 por ciento por ciento de los procedimientos que no se asignaron mediante una licitación pública se cuenta con una justificación legal adecuada.
Tahís Martínez subrayó, además, que en 24 procedimientos, que representan un monto de 3 mil 36 millones de pesos, se dieron en promedio diez días para preparar las propuestas, lo que puede restringir la competencia, pues es muy poco tiempo para que un proveedor presente una propuesta.
Adicionalmente, la investigadora alertó que si una dependencia compradora adjudica un contrato al proveedor con la única propuesta solvente, existe riesgo de una simulación de competencia; en el caso del NAIM, agregó, la suma de montos adjudicados a 34 procedimientos con una sola propuesta de este tipo asciende a mil 801 millones de pesos.
Pese a lo anterior, el Imco planteó que en el 95 por ciento de los contratos analizados los montos por los cuales se adjudicaron estuvieron dentro de lo presupuestado o incluso por debajo; por ende, concluyó, se debe saber separar estos asuntos de la necesidad de que continúe la construcción del NAIM, dada su importancia para resolver la saturación aérea que enfrenta el AICM.
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