Por: Christian Pérez

El partido Morena lleva a cabo actualmente su proceso de definición de la Coordinación de la Defensa de la Cuarta Transformación a nivel nacional. Son ya más de 70 días de Asambleas Informativas y recorridos de los aspirantes en todo el país, en los que buscan promover los logros del proceso de cambio político que encabeza el Presidente Andrés Manuel López Obrador desde 2018.

Y ha sido en la recta final de ese calendario de recorridos que el Partido Morena logró consensuar la metodología que habrá de seguir la encuesta que levantará ese Instituto Político, así como determinar por medio de insaculación las cuatro casas encuestadoras que realizarán los ejercicios espejo, establecidos en la Convocatoria que aprobó el Consejo Nacional el 12 de junio de 2023.

El actual es un momento crucial, y lo reconocen prácticamente todos los aspirantes a Coordinar los Comités de Defensa de la Transformación. Tras no haber habido “piso parejo” ni reglas de promoción y financiamiento claras, la última parte del proceso exige que la dirigencia de Morena y los aspirantes actúen con prudencia y altura de miras.

En ese orden de cosas, Marcelo Ebrard en un mensaje público, llamó a que los actores políticos, en particular los gobiernos municipales, estatales y al federal a “dejar que la gente decida”, esto es, no intervenir en la voluntad popular en la antesala del levantamiento de encuestas. Incluso el Presidente López Obrador reconoció su legítimo derecho a emitir dicho pronunciamiento.

Posteriormente se supo que, tras haber realizado la insaculación de casas encuestadoras propuestas por los aspirantes, donde de 10 propuestas prevalecerían 4, los representantes de Ricardo Monreal y Adán Augusto López firmaron el resultado del sorteo “con reservas” y la representante del excanciller se negó a firmar, dado que el azar determinó que no fuera seleccionada ninguna casa encuestadora propuesta por Marcelo.

Esos hechos generaron una ola de mensajes y pronunciamientos de ida y vuelta en tono polarizante entre los distintos simpatizantes de los aspirantes a Coordinar la Defensa de la 4T cuyo trasfondo tiene que ver con negar o no la posibilidad de que haya debate o autocrítica al interior del movimiento y con mayor razón en una contienda como la que está actualmente en curso. Sostengo que la crítica no es traición, que el debate y la expresión de ideas o propuestas que enriquecen o recomponen procesos tienen un alto valor para el quehacer político, más aún tratándose de la continuidad del proyecto de transformación.

Los llamados a la unidad no se hicieron esperar: la dirigencia de Morena, aspirantes y actores políticos diversos se pronunciaron en ese sentido. Debe haber unidad, sí, pero esta no se decreta, la unidad se construye, reza un dicho que he escuchado de políticos sensatos en la izquierda.

En ese contexto, Ricardo Monreal dio una vez más cátedra política y realizó una acción contundente por la unidad del proceso de encuestas: renunció a su propuesta de casa encuestadora para dar lugar, por orden de prelación, a una propuesta por Marcelo Ebrard. Considero que son relevantes las implicaciones:

  • Abona a la unidad y a la legitimidad del proceso, al mitigar los riesgos de ruptura.
  • Ayuda al Presidente y a la Dirigencia de Morena para que salga adelante el levantamiento de encuestas.
  • Brinda apoyo directo a un aspirante, Marcelo Ebrard, quien agradeció esta acción y reconoció el oficio político del zacatecano.
  • Brinda apoyo indirecto a los demás aspirantes al fortalecer la legitimidad de todo el proceso, hecho que reconoció públicamente el aspirante Adán Augusto López.

En política la unidad no se decreta discursivamente ni se materializa solo con llamados de unos a otros; se construye con acciones que se concretan con pasos como el que dio Ricardo Monreal. Si se está a favor de la continuidad de la transformación y de la unidad del movimiento, en este momento hay una pregunta obligada para aspirantes, dirigentes y protagonistas del cambio verdadero: ¿qué acciones y pasos estamos dispuestos a dar para construir la unidad del movimiento de cara al 2024?