Ni a quién creerle, damas y caballeros. Y es que, en esta carrera rumbo a 2018, Morena parece que, si no gana, al menos va a tener un final de fotografía y, sin duda alguna, eso le está dando miedo a los competidores, pues lo que comenzó como una propuesta de Andrés Manuel López Obrador para crear un nuevo partido, ahora se posiciona como el nido de donde saldrá uno de los principales contendientes a la presidencia.
Y es que este partido ―¿cuál no?― promete cambiar a México, liberarlo de la corrupción y llevarlo a un nuevo nivel donde la política esté libre de mañas, sobornos, robos, malas jugadas, relaciones con el narco…en fin, de todo aquello que hace que la política sea política.
Morena ―como cualquier otro partido― tiene defensores y detractores, pero, al parecer, los primeros van en aumento y los segundos crecen todavía más, pues ahora lo ven como una terrible amenaza. Basta con recordar las pasadas elecciones en el Edomex, donde Delfina casi le arrebata la gubernatura a Del Mazo.
Por supuesto, no estamos diciendo que el partido de Obrador sea la verdadera esperanza de este país y que sea una blanca (o morenita) palomita, pero sí que sus contrincantes están nerviosos por enfrentarlo, por lo cual, se aferrarán de cualquier tropiezo ―sea verdad o no― que Morena tenga para ponerle las trabas que sean posibles.
Dos de estas principales trabas se han dado recientemente. La primera de ellas es la supuesta relación que tendría Rigoberto Slagado, jefe delegacional de Tlahuác por Morena, con el narcotraficante Jesús Pérez Luna, mejor conocido como El Ojos; la segunda traba vendrían a ser las acusaciones que Raúl Flores, líder del PRD en la capital, ha hecho contra el partido de Obrador, respecto a que ésta ha realizado supuestos actos anticipados de campaña.
Así, Flores ha denunciado ante el Instituto Nacional Electoral que los candidatos morenistas Claudia Sheinbaum, Ricardo Monreal, Martí Batres y Mario Delgado, supuestamente, se han estado promoviendo políticamente mediante videos de YouTube, recorridos y hasta en espectaculares.
Sin embargo, el perredista comenta que lo verdaderamente importante es saber de dónde proviene el dinero para estos actos, pues incluso menciona que hay posibilidades de que la lana haya salido de la mano de El Ojos, lo que ya de por sí sería dinero ilegal.
Por supuesto, esto vendría a ser preocupante, pues si bien está claro que ningún partido es completamente puro, por más que se traten de mantener alejados de «la mafia del poder», siempre habrá entre sus filas un negrito en el arroz. Sin embargo, también queda la cuestión sobre por qué el partido de Obrador va cobrando tanta fuerza, pues apenas hace unos días ya seis diputados del PRD mudaron de piel amarilla a morena.
Asimismo, hace unos días, AMLO no quiso dar detalles sobre qué candidato de Morena podría ser el elegido para lanzarse por la gubernatura de la CDMX, pues dijo que, de seguir hablando, estaría incurriendo en actos anticipados de campaña, y de lo cual sus opositores podrían sacar partido.
¿A quién creerle, entonces?
