«Olvido no, perdón sí»: AMLO.
Con el «Foro Escucha Ciudad Juárez» AMLO dio inicio a los diálogos por la paz, en un primer intento por erradicar la violencia en México.
Pues a poco más de un mes de que López Obrador dejara de pertenecer al club de las «cruzazuleadas» y se hiciera con el título del nuevo presidente de México, los problemas que la administración actual dejará comienzan a desparramarse: educación, energía, corrupción y, sobretodo, violencia e inseguridad.
Y es que precisamente hoy el tabasqueño visitó Ciudad Juárez, localidad fronteriza de nuestro país con Estados Unidos, que ha sido terriblemente azotada por la violencia letal y desmedida desde hace ya varios años.
Ahí inauguró el primer diálogo por la paz, al que nombró «Foro Escucha Ciudad Juárez» y ahí aseguró que respeta a quienes piden «ni perdón ni olvido», pero aseguró que él pide «olvido no, perdón sí» y también aseguró que en noviembre estará lista la estrategia de seguridad que seguirá su gobierno.
No obstante, el panorama para López Obrador no es el más sencillo, pues hoy más que nunca la población exigirá enterrar a la impunidad con las viejas prácticas que gobiernos priistas y panistas venían ejerciendo y que convertían los delitos y las muertes en un número de folio encerrado en un folder empolvado. Y aunque en la teoría olvidar no, perdonar sí, es fácil de expresar, en la práctica hay que superar y reparar los daños de la ola de violencia que ha azotado a México para, entonces sí, hablar de perdonar.
Así pues, en esas reuniones que el virtual presidente de México aseguró que realizará todos los días, a las 06:00 am, con su gabinete de seguridad, el morenista tendrá que echar toda la leña al fogón y encontrar la forma de detener los delitos disparados por la violencia, entre ellos: feminicidios, asesinato a periodistas, secuestro, narcotráfico, abuso de autoridad, trata de blancas, asaltos a transporte público, a trenes, huachicoleo, tan solo por mencionar algunos.
Además, en alguna de esos 20 foros por la paz también saltarán casos que el gobierno peñista no pudo finiquitar y que, sin duda, recaerán en los hombros de la nueva administración, especialmente el caso Ayotzinapa, sobre el cual, incluso, López Obrador prometió dar resultados contundentes.
Por ende, el señor Andrés Manuel, su titular de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, así como su secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, tendrán que ir haciendo «tripas de liga» para poder ir atendiendo y resolviendo todos los nudos que la férrea violencia y la impunidad han ido dejando en la población mexicana, gente que votó por Morena con la ilusión de ver y palpar cambios reales y no de ficción.
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