Este sábado 24 de junio se llevó a cabo la marcha al orgullo gay, donde acudieron más de 250 mil personas con el grito de libertad, justicia y dignidad.

La primera manifestación de la comunidad LGBTI+ fue el 26 de julio 1978, durante la marcha por el aniversario de la Revolución Cubana, en donde participaron aproximadamente mil personas que se identificaron como integrantes del Frente de Liberación Homosexual de México, mediante la cual buscaban la defensa de sus derechos replicando consignas como “¡Sin libertad sexual no habrá liberación social!”

Esta vez, 45 años después se sigue alzando la voz en luchan por el mismo trato para todos, por un trato digno hacia las personas de la comunidad LGBTI+, para que las autoridades vislumbren las problemáticas que enfrenta esta comunidad y generen iniciativas de ley, así como la implementación de procesos de procuración de justicia que garanticen la no discriminación y la defensa de sus derechos.

Y es que, en materia de datos personales sensibles, como es el caso de la salud, la comunidad LGBTI+, sufre una amplia discriminación.

¡Me explico! los datos personales sensibles son todos aquellos que de conocerse pueden ser causa de discriminación hacia el titular de los mismos, como el resultado de sus estudios clínicos, su historial médico y en general, su estado de salud o su orientación sexual; es por ello que estos datos deben adquirir una protección amplia y libre de vulneración, a fin de salvaguardar la esfera más íntima de las personas.

Al respecto, la legislación mexicana prevé que, si proporcionaste algún dato sensible al sector salud, sin importar si este es público o privado, estos tienen la obligación de guardar total secrecía sobre tu información, a menos que des tu consentimiento para que se le dé un uso distinto al inicialmente planteado por medio de un aviso de privacidad, el cual tiene como objeto dar a conocer al titular de los datos los alcances y condiciones generales del tratamiento que se les dará, a fin de que esté se encuentre en posibilidad de tomar decisiones informadas sobre el uso de los mismos, y así tener un debido control que se verá reflejado en el acceso, rectificación, cancelación y oposición del uso de los datos.

También debes saber que existe una problemática para acceder a tu expediente clínico, toda vez que los médicos han expuesto que no pueden proporcionarte la información que obra en él, al considerar que es propiedad de la institución de salud e incluso que conlleva los diagnósticos y conocimientos del médico; sin embargo, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales ha determinado que, contrario a lo expuesto la información relativa a los estudios clínicos y toda aquella información que obre dentro de tu historial médico le pertenece al titular de los datos.

Recuerda que solo puedes acceder al expediente clínico y a toda la información que obra en él, únicamente si eres el titular de los datos.

En caso de que “alguien” divulgue tus datos personales o les dé un uso distinto para el que fueron obtenidos o te nieguen el acceso a tu expediente clínico o a los datos referentes a tu salud, puedes denunciarlo a través de TEL INAI al 800 835 43 24, donde podrán apoyarte; si lo prefieres también puedes presentar tu queja de manera física o por correo electrónico [email protected].

No tienes por qué sufrir discriminación; “todos los derechos para todas las personas”.

María Luisa Jiménez Paoletti. Colaboradora de Integridad Ciudadana, Doctorante en Anticorrupción y Sistema de justicia, Maestra en Derechos Humanos, Licenciada en Derecho por la UNAM y especialista en datos personales por la Agencia Española de Protección de Datos.

Twitter: @LuisaPaoletti2 @Integridad_AC

 

María Luisa Jiménez Paoletti. Colaboradora de Integridad Ciudadana, Doctorante en Anticorrupción y Sistema de justicia, Maestra en Derechos Humanos, Licenciada en Derecho por la UNAM y especialista en datos personales por la Agencia Española de Protección de Datos. Twitter: @LuisaPaoletti2 @Integridad_AC