El gobierno a cargo del primer ministro de Japón, Shinzo Abe, se encuentra en riesgo, luego de ser señalado por corrupción en la venta de terrenos públicos, situación que ha generado un gran descontento en la sociedad nipona.
Las acusaciones en contra del Primer Ministro y su esposa derivaron luego de una supuesta donación a la guardería japonesa Moritomo Gakuen, investigada en un escándalo de compra de terrenos públicos.
Ante esto, el operador de la guardería fue llamado este jueves a testificar ante la Dieta (Cámara Baja) del Parlamento japonés, donde afirmó, bajo juramento, que recibió una donación directa de un millón de yenes (8 mil 900 dólares) de Abe a través de su esposa Akie Abe. «Ella me dio un sobre con un millón de yenes y me dijo ‹De parte de Shinzo Abe›», relató.
Por su parte, el primer ministro, Shinzo Abe ha negado en varias ocasiones haber realizado donativos a Moritomo Gakuen, e incluso ha prometido dimitir como primer ministro y como diputado si se demuestra su implicación o la de su mujer en los supuestos favores de las autoridades al centro educativo.
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