Continúan las agresiones y la violencia en el país y en esta ocasión les tocó a siete periodistas en la carretera Iguala – Altamirano en Guerrero el pasado 13 de mayo en donde fueron amedrentados por presuntos integrantes de organizaciones delictivas.
De acuerdo con los hechos, los siete periodistas de procedencia nacional e internacional se encontraban en un vehículo sobre la carretera, cuando fueron interceptados y despojados de todo su equipo, así como de su automóvil.
Los reporteros de empresas como Imagen, Vice, Quadratin, La Jornada, entre otros, fueron abordados por encapuchados, quienes a punta de armas largas les quitaron grabadoras, cámaras, computadoras, celulares y el vehículo luego de querer ir a cubrir –otros– hechos violentos suscitados en San Miguel Totolapan.
LA Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión (FEADLE) abrió una carpeta de investigación para dar con los agresores, quienes se presume, eran miembros de La Familia Michoacana, según los afectados por el hecho y el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo.
Parece inverosímil que luego de cruzar un retén militar, hayan sido abordados por elementos del crimen organizado y entorpecieran la labor de los reporteros que irían a cubrir más agresiones en donde resultaron ocho personas muertas luego de enfrentamientos de fuerzas armadas y autodefensas en la región de Tierra Caliente.
Cabe destacar que en 2016 hubo 11 asesinatos a periodistas, el número más grande en más de 10 años, así como 426 agresiones a personal de prensa, las cuales fueron cometidas por funcionarios públicos, según un reporte de Artículo 19.
HOY NOVEDADES / LO DE HOY
