Con información del CMLL

La heredera de la gran gladiadora Marcela; Skadi, llega por primera vez a un Grand Prix Femenil, donde representará a México el próximo viernes 27 de octubre en la Arena México donde se destaca por ser, sin duda, la más poderosa.

Conocida como “La Reina de los lobos”, se ha sobrepuesto a distintas adversidades, una lesión en el hombro la ausentó durante cuatro meses, posteriormente volvió a recaer en la lesión del hombro, esta vez seis meses más se sumarían a la ausencia de Skadi: “Mi lesión en el hombro ha sido el golpe más duro, estuve mucho tiempo fuera y aunque pensé que ya estaba todo bien, no fue así, nuevamente se me salió el hombro y estuve seis meses fuera, tuve además fractura de tibia y peroné, me pusieron clavos y una placa, imagínate, me encontraba destrozada y mi madre; Marcela aún más. Ella estuvo en todo momento, afortunadamente salí bien librada de esto”.

¿Es difícil ser hija de una mujer estandarte como Marcela? “Híjole, es mucha responsabilidad, yo le echo muchas ganas porque ser hija de Marcela es un gran honor y quiero dar lo mejor, porque también el público se merece lo máximo, no puedo equivocarme ya no hay margen de error.

“Debo mencionar que sí ha sido también difícil, he luchado siempre porque los cuerpos sean aceptados, he logrado ganarme al público y poco a poco van reconociendo mi trabajo. Los haters opinaron, pero las oportunidades que he tenido me las he ganado a pulso. Desde los entrenamientos, los profesores no me veían futuro y me decían que no lograría nada por estar así, y gracias a Dios aquí sigo, dando lo mejor de mí, porque son metas que me propuse alcanzar y hay muchas niñas que son grandes y me motivaron a seguir porque dicen que quieren ser como yo. Quiero decirles que todas pueden lograr sus sueños y alcanzar sus metas, lo importante es creer en ti, la gente te va a tirar todo el tiempo, porque no han logrado sus metas, si bien yo no me siento cómoda con vestuarios abiertos, sí estoy segura de que puedo ser una gran rival en el Grand Prix, donde fue mi sueño poder participar, hoy es una realidad y le vamos a echar todas las ganas, porque verán a muchas luchadoras queriendo ganar”.

SKADI trabaja día a día por seguir materializando sus sueños, pues otra meta es protagonizar un aniversario. Recordó que su mamá le ganó la máscara a Rosa Negra y el escuchar que toda la arena apoyaba a su mamá le marcó ese gran momento y que no hace mucho se repitió cuando enfrentó a Faby que recuerda también fue extraordinario el cumplir ese sueño.

“Actualmente las luchadoras necesitan capacitarse, yo siempre aprendo con las nuevas y mi meta o mi nuevo reto es el abrir el camino a otras chicas de talla grande que quieran ser luchadoras, todo lo que haces con el corazón lo puedes lograr”.

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