Durante julio de 2023 se vendieron cuatro mil 334 vehículos pesados al menudeo, 42.8 por ciento más que lo registrado en el mismo mes de 2022. Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), es la variación más grande para un séptimo mes desde hace cinco años.

La Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (Anpact) reveló que de enero a agosto de 2023 se comercializaron 35 mil 553 unidades en México, un aumento del 38.4%. De ese total, 30 mil 82 unidades fueron camiones de carga y tractocamiones, siendo un crecimiento del 33.1% con respecto al mismo periodo del 2022.

Este crecimiento en la producción y venta de unidades de carga ha impulsado a las empresas a conseguir formas de mover sus productos, por lo cual se plantean si deben tercerizar el servicio de transporte o adquirir los propios. Aidé Ponce, gerente regional zona norte de ELAM-FAW, puntualizó a NotiPress las ventajas y desventajas de cualquiera de las dos opciones.

Flota propia

Entre las ventajas de contar con una flota propia, destaca que la empresa tiene el control total sobre sus operaciones logísticas. Desde el mantenimiento hasta la selección de rutas, se podrán adaptar según las necesidades. Asimismo, tienen la capacidad de adaptarse rápidamente a los cambios en la demanda o en la naturaleza de la carga, lo cual permite ajustes ágiles en horarios, rutas y capacidad de carga. Usar vehículos identificados con la marca puede fortalecer su presencia y visibilidad.

Si alguna empresa considera que es muy caro comprar un vehículo, existe la opción de arrendarlo. La inversión es un 30 por ciento menor en comparación de la compra. Su costo financiero es 17% menor a la adquisición por crédito y se pueden otorgar beneficios fiscales.

Entre sus desventajas están los costos iniciales y operativos, tales como los salarios y combustibles, los cuales pueden ser significativos. Con la rápida evolución de la tecnología en el sector de transporte, la flota se podría volver obsoleta rápidamente; la empresa debe de estar dispuesta a invertir en actualizaciones para mantenerse competitiva.

Tercerización del transporte de carga
Obtener el transporte de carga de terceros permitirá a las empresas evitar los costos fijos asociados con una flota propia. Como ventaja, pagar por su uso o por envío puede ser más rentable, especialmente en periodos de demanda variable.

Externalizar el transporte de carga permite a las empresas centrarse en sus competencias principales. Finalmente, las compañías de transporte tienen una experiencia considerable en logística, logrando aportar mejores prácticas y eficiencias que podrían no ser evidentes para una empresa sin experiencia en el sector.

Algunas desventajas de acudir al tercerizar es que la compañía cede el control operativo. De esa manera, los retrasos imprevistos o daños en la carga pueden ser más difíciles de gestionar directamente. La fiabilidad de los proveedores de servicios logísticos es crucial, por lo cual se pueden exponer a riesgos relacionados con la calidad del servicio y la capacidad de respuesta a las demandas cambiantes.

El crecimiento significativo en las ventas de vehículos pesados en México durante julio de 2023 y el aumento en la comercialización de unidades de carga a lo largo del año plantean a las empresas una decisión crucial: optar por mantener una flota propia o tercerizar el servicio de transporte.

Cada opción tiene sus ventajas y desventajas, y la elección dependerá de la naturaleza de las operaciones de cada empresa, su capacidad financiera y su visión a largo plazo. La clave radica en evaluar minuciosamente las necesidades y objetivos logísticos para tomar la decisión más acertada que les permita mantenerse competitivas en un mercado en constante evolución. Sea cual sea la elección, la industria de carga pesada en México está experimentando un período de transformación y adaptación, donde la innovación y la eficiencia son esenciales para el éxito continuo.

Crédito: Sergio F Cara (NotiPress)

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