#RenegadoInternacional

Si de por sí es difícil convivir dentro de una banda de rock en medio de las envidias y el ego; tener que aguantar a un hermano no es cosa fácil.

No solo The Kinks u Oasis representan el ejemplo de las numerosas escenas de amor y odio en el mundo de la música. Historias por demás curiosas sucedieron desde que Ray Davies decidió, un buen día que la banda debía continuar sin su hermano Dave. Por si fuera poco, Ray intentó convencer a Dave para que se sonara a un acaudalado promotor, aquel que inspiró “David Watts”. Todo esto, además de sus famosas borracheras, fue motivo suficiente para una serie ya histórica de peleas en escena y reencuentros rencorosos.

Liam y Noel Gallagher quizás representen más el caso de los hermanos envidiosos. El video de la entrevista que hacen a los miembros de Oasis, en la que se dedican a atacarse el uno al otro fue récord de vistas en YouTube. Una serie de declaraciones que sigue a la anterior con una retahíla de insultos, peleas, celos y declaraciones desafortunadas.

En más de una ocasión, Noel amenazó con cantar todas las canciones de sus próximos discos. También llegó a decir que tenía grabado su primer disco en solitario para reconocer, después, que sólo lo había hecho para irritar a Liam. Para completar el circo, un tercer hermano, Paul, albañil hasta hace poco y manager de algunas bandas, echó más leña al fuego escribiendo las memorias no autorizadas de los hermanos.

Phil y Don Everly, conocidos como los Everly Brothers, se lo tomaron más a pecho: no se hablaron durante quince años. Y, cuando por fin alguien logró reunirlos en un estudio, en mitad de la canción que estaban grabando Don se agarró a golpes con su hermano Phil y se marchó. ¿La razón? “El cabrón se acostó con mi mujer” aseguró después.

Los Beach Boys, los hermanos Brian, Dennis, Carl y el primo Mike Love tienen su propia historia. Brian se volvió loco a mediados de los 60 durante la grabación de Pet Sounds, después de experimentar con cientos de sustancias y aparatos eléctricos.

A finales de los 80 un doctor convenció a Brian Wilson para que volviera a la actividad discográfica, quedándose con todos los ingresos de su primer disco en solitario y de una parte de su fondo de catálogo, e impulsándole a retomar el control del grupo. Todos acabaron enfrentados en varios procesos legales por el nombre, el dinero, los derechos de autor…

Tal vez el caso más escandaloso es el de Jimmy Vaughan. Su talento y el de su hermano Stevie Ray eran similares. Jimmy empezó como líder de los Fabulous Thunderbirds, pero la fama de los discos en solitario de su hermano menor acabaron por eclipsarlo. Grabaron juntos, con inmejorables resultados en el disco Family Style, pero desde que Stevie murió al estrellarse la avioneta en la que viajaba, Jimmy se dedicó a organizarle homenajes. Le resultó más lucrativo.

Síganme en Twitter: @RenegadoInt